La Reflexologia Podal



La reflexología Podal tiene como origen los Incas peruanos, los cuales la trasmitieron a los indios Cherokees de EE.UU. Aunque también en pinturas descubiertas en el interior de las pirámides egipcias, aparecen grabados en los cuales se ven la realización de  presiones pódales que podían ser tratamientos de reflexología. La reflexología moderna nace esencialmente de los trabajos de principios del siglo XX llevados a cabo por dos americanos, los doctores en medicina William Fitzgerald y Eunice Ingham



Se basa en la representación que tienen las zonas reflejas del cuerpo en los pies. Así la mayor parte de los órganos y estructuras del cuerpo humano tienen una conexión y están representados en la planta del pie. De este modo, cuando un órgano tiene alguna patología, su zona refleja de los pies se vuelve más dolorosa y muy sensible a la presión. Si actuamos sobre estas zonas sensibles ponemos en marcha mecanismos que necesita el cuerpo para volver a su estado normal de salud y equilibrio (homeostasis).

La Reflexología Podal es un método sobre todo terapéutico, es decir sirve para canalizar la energía y mejorar el estado general de salud y algún tipo de lesiones, pero también ayuda a diagnosticar problemas de salud. Es compatible con otros método terapéuticos como el masaje general, frío, calor e incluso con los tratamientos médicos y  medicamentos.

Es una terapia global muy efectiva y que logra excelentes resultados, a la vez que segura y útil a cualquier edad.


Otra ventaja de este método es que sirve tanto como para tratar enfermedades de órganos internos como del aparato locomotor.

La reflexología está indicada para numerosos problemas de salud, entre ellos podemos destacar:

-               Dolores viscerales en general (cólicos, cálculos, etc.)
-               Dolores del aparato locomotor (espalda, articulaciones, contracturas musculares, etc.)
-               Neuralgias, migrañas.
-               Ciática.
-               Trastornos menstruales.
-               Trastornos digestivos.
-               Trastornos nerviosos y del estado de ánimo.
-               Trastornos pulmonares.
-               Trastornos urinarios.
-               Trastornos metabólicos.
-               Fibromialgia.
-               Contracturas musculares.
-               Drenaje linfático.
-               Problemas en riñón y próstata.
-               Ayuda a dormir mejor  ya que produce un beneficioso estado de relajación
-               Equilibra el funcionamiento de todo el organismo... y mucho más que puedes descubrir.